BRUSELAS (AP) — El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy dijo el martes que el presidente ruso Vladímir Putin quiere que Ucrania se retire del 30% restante de la región de Donetsk como parte de un acuerdo de alto al fuego, una propuesta que el mandatario de Ucrania rechazó categóricamente.
Zelenskyy reiteró que Ucrania no se retirará de los territorios que controla, ya que —señaló— eso sería inconstitucional y sólo serviría como trampolín para una futura invasión rusa.
Dijo que las discusiones diplomáticas lideradas por Estados Unidos, centradas en poner fin a la guerra, no han abordado las garantías de seguridad para Ucrania para prevenir futuras agresiones rusas y que los formatos de reunión que se están discutiendo actualmente no incluyen la participación de Europa, ambas demandas clave de Kiev.
Zelenskyy indicó que la necesidad de concesiones territoriales le fue transmitida por funcionarios estadounidenses antes de una cumbre entre Putin y el presidente estadounidense Donald Trump programada para el viernes, y en reuniones adicionales a nivel de asesores de Seguridad Nacional.
Aún no estaba claro si Ucrania participaría en la cumbre del viernes. La Unión Europea también ha sido excluida de la reunión, y el martes apelaron a Trump para que proteja sus intereses.
Zelenskyy dice que Ucrania no se retirará del Donbás
Zelenskyy indicó en una rueda de prensa en Kiev el martes que Putin quiere los 9.000 kilómetros cuadrados (3.500 millas cuadradas) restantes de Donetsk, donde se libran las batallas más duras de la guerra, como parte de un plan de alto al fuego.
Hacerlo le daría a Rusia casi la totalidad del Donbás, una región que comprende el corazón industrial del este de Ucrania que Putin ha codiciado durante mucho tiempo.
Zelenskyy supo detalles sobre la posición rusa tras una llamada que mantuvo con Trump y el enviado especial estadounidense Steve Witkoff, después de la reunión bilateral que sostuvo este último con Putin. Witkoff le dijo a Zelenskyy que Rusia estaba dispuesta a terminar la guerra y que debería haber concesiones territoriales de ambas partes. Algunos socios europeos también formaron parte de la llamada.
“Y que, probablemente, Putin quiere que dejemos el Donbás. Es decir, no sonó como que Estados Unidos quiera que nos vayamos”, señaló, recordando la llamada.
Zelenskyy reiteró que retirarse del territorio controlado por Ucrania estaba fuera de discusión, especialmente porque la cuestión de las garantías de seguridad para Ucrania no se estaba discutiendo .
“No dejaremos el Donbás. No podemos hacer esto. Todos olvidan la primera parte: nuestros territorios están ocupados ilegalmente”, dijo Zelenskyy a los periodistas. “El Donbás para los rusos es un trampolín para una futura nueva ofensiva”.
Zelenskyy dijo que esto es lo que ocurrió en 2014 cuando Rusia se anexó ilegalmente la península de Crimea.
Buscando la atención de Trump antes de la cumbre
Trump ha dicho que quiere ver si Putin se plantea seriamente poner fin a la guerra, que comenzó hace más de tres años.
El presidente estadounidense ha decepcionado a los aliados en Europa al decir que Ucrania tendrá que ceder parte de su territorio que ahora está en manos de Rusia. También mencionó que Moscú debe aceptar intercambios de tierras, aunque no está claro qué podría ceder Putin.
Los europeos y Ucrania temen que Putin, que ha librado la mayor guerra terrestre en Europa desde 1945 y ha utilizado el poder energético de Rusia para intentar intimidar a la UE, pueda lograr concesiones favorables y establecer las líneas generales de un acuerdo de paz sin ellos.
Refiriéndose al formato para las conversaciones de alto al fuego, Zelenskyy dijo el martes que Estados Unidos propuso una reunión bilateral, entre Estados Unidos y Rusia, y luego una reunión trilateral que incluiría a Ucrania. Zelenskyy dijo que la presencia de Europa era importante para Kiev porque estos eran los únicos socios que ofrecían garantías de seguridad, incluyendo el financiamiento del ejército ucraniano.
El temor generalizado entre los países europeos es que Putin ponga la mira en uno de ellos si gana en Ucrania.
Sus líderes afirmaron el martes que “acogen con satisfacción los esfuerzos del presidente Trump para poner fin a la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania”. Pero subrayaron que “el camino hacia la paz en Ucrania no puede decidirse sin Ucrania” y que “las fronteras internacionales no deben cambiarse por la fuerza”.
Los europeos harán un nuevo intento de atraer a Trump a la causa de Ucrania el miércoles en reuniones virtuales convocadas por el canciller alemán Friedrich Merz. Trump no confirmó su participación, pero afirmó que va a “recabar las ideas de todos” antes de reunirse con Putin.
Rusia mantiene un frágil control sobre cuatro regiones del país, dos en el este y dos en el sur.
Mykhailo Podolyak, asesor del jefe de despacho de Zelenskyy, señaló que cualquier cosa que no sea la derrota estratégica de Rusia significaría que cualquier acuerdo de alto al fuego se haría en los términos de Moscú, erosionaría el derecho internacional y enviaría una señal peligrosa al mundo.
Un “momento profundamente alarmante para Europa”
La aparente reinserción pública de Putin por parte de Trump —un paria en la mayor parte de Europa— ha inquietado a los partidarios de Ucrania.
La cumbre en Alaska es un “momento profundamente alarmante para Europa”, apuntó Nigel Gould-Davies, investigador sénior del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos en Londres.
Según Gould-Davies, Putin podría persuadir a Trump para intentar terminar la guerra “aceptando la soberanía rusa” sobre partes de Ucrania, incluso más allá de las áreas que actualmente ocupa. Trump también podría aliviar o levantar sanciones que están causando “dolor crónico” a la economía rusa.
Eso provocaría una “división realmente seria en la alianza transatlántica”, aseveró.
La guerra no se trata de la expansión territorial de Rusia, sino del objetivo de Putin de subordinar a Ucrania, lo que crearía la oportunidad de amenazar otras partes de Europa, señaló Gould-Davies.
No estaba claro si los europeos también se sintieron inquietos por la afirmación errónea de Trump de que viajaría a Rusia el viernes para reunirse con Putin. La cumbre se celebrará en el estado estadounidense de Alaska, que fue colonizado por Rusia en el siglo XVIII hasta que el zar Alejandro II lo vendió a Estados Unidos en un acuerdo territorial en 1867.
El comunicado conjunto europeo del martes fue presentado como una demostración de unidad. Pero el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, que es el aliado más cercano de Putin en Europa y ha intentado bloquear el apoyo de la UE a Kiev, fue el único de los 27 líderes del bloque que se negó a respaldarlo.
Rusia se acerca a Pokrovsk
Rusia parecía estar a punto de tomar Pokrovsk, una ciudad importante en la región de Donetsk.
Analistas militares que utilizan información de fuentes abiertas para monitorear las batallas dicen que las próximas 24-48 horas podrían ser críticas. La toma de Pokrovsk le daría al Kremlin una importante victoria en el campo de batalla antes de la cumbre. También complicaría las líneas de suministro ucranianas hacia la región de Donetsk, donde el Kremlin ha centrado la mayor parte de sus esfuerzos militares.
“Mucho dependerá de la disponibilidad, cantidad y calidad de las reservas ucranianas”, escribió Pasi Paroinen, analista del grupo Black Bird, con sede en Finlandia, en una publicación en redes sociales el lunes por la noche.
El ejército ucraniano dijo que sus fuerzas están manteniendo a raya a las unidades de infantería rusas que intentan infiltrarse en sus posiciones defensivas en la provincia de Donetsk. El mando militar ucraniano de la región publicó en redes sociales el lunes que la situación sigue siendo “difícil, desagradable y dinámica”.
En otras partes de Ucrania, un ataque con misiles rusos contra una instalación de entrenamiento militar dejó un soldado muerto y 11 heridos, según reportaron las Fuerzas Terrestres de Ucrania en redes sociales.
APNEWS – POR LORNE COOK and SAMYA KULLAB AP Foto/Evan Vucci, archivo